viernes, 21 de diciembre de 2007

Dios me ve


En todo desierto de pruebas Dios tiene un oasis de consuelo.
Bendito es mi Jesús en desiertos y en plenitud.

El dolor es una válvula, un escape del alma, pero la amargura es peligrosa y el odio es letal.

Toda adversidad tiene una llave oculta; siempre hay algo bueno escondido.

Medicina preventiva: debo atender prioridades para evitar las urgencias.

Aunque yo no vea a Dios; Dios oye todo lo que hablo y ve todo lo que hago.

La fuente de nuestra provisión es Dios. El empleador solo es un canal de nuestra provisión.

Es imposible ser imparcial sin que intervengan nuestras emociones.
Después del pensamiento que Dios tiene de mí; el mas importante es el que yo tengo de mi mismo.

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