jueves, 3 de abril de 2008

Enciende una luz


ENCIENDE UNA LUZ



Yo Soy la luz del mundo; el que me sigue no andará en tinieblas sino que tendrá la luz de la vida. (Juan 8: 12)
Pero no hay peor ciego que el que no quiere ver. Y rechazar la luz aumenta la ceguera. La persona no es condenada por ser ciega, sino por rechazar la cura. Jesús es la luz del mundo pero no sólo es encender la luz, sino activarse a ver.


Jesús es la Verdad y la Verdad te hace libre. Una mente libre no dejará de serlo aunque esté entre rejas. Encierra a un perro y éste ladrará y llorará… pero encierra a un águila y jamás se deprimirá; morirá en el intento pero no dejará de intentar su libertad.


Riqueza interior; recursos internos que gobernarán mis circunstancias externas.
De tales riquezas, de tales recursos echaré mano en los momentos críticos de mi vida.
“La suma de Tu Palabra es Verdad y eterno es todo juicio de Tu Justicia”

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